Historia

RESEÑA HISTÓRICA PARROQUIA DE HUIGRA.

“ETERNA PRIMAVERA”

Huigra fue la segunda población creada al paso del ferrocarril, donde empezaron a funcionar en forma organizada las oficinas de la compañía, Julio C. Carrión, fue el primer jefe de estación de este lugar, quien hacia la recepción de los trenes que llegaban tripulados por gringos y jamaiquinos. Los convoyes venían salvando la gradiente del cinco y hasta el seis por ciento, arrastrados por las pequeñas locomotoras “Mogul”, cuyo peso de 45 toneladas resultaban casi inapropiadas para correr en una gradiente de tal magnitud.

Así mismo, don Roberto Maldonado fue el primer telegrafista, quien transmitía, a la Gerencia las anotaciones y datos hechos en el “REGISTRO DE TRENES” como: nombre y apellido del conductor y maquinista, fecha, nombre del tren, numero de la locomotora, hora de llegada, señales desplegadas y cuantos vagones traía, este último lo más interesante. Los telegrafistas de la Gerencia que recibían estos partes, entre otros mencionaremos a Filemón Flores, Segundo Ronquillo, Néstor Santander y Luis Sotomayor, también primeros telegrafistas de las mencionadas oficinas.

Los pueblos del Austro, que tuvieron conocimiento de este magnífico servicio que se había organizado entre Guayaquil y las ciudades del interior, se interesaron en formalizar un contrato con la Compañía del Ferrocarril, para que esta se encargue del arreglo y mantenimiento del camino de herradura desde Huigra hasta el Cañar, porque hasta entonces no existía sino un angosto camino (chaquiñán). La compañía segura de que iba a tener un buen tráfico con el arreglo de este camino no vaciló en realizar el contrato, y el 20 de Junio de 1903, se firmaron las escrituras respectivas con los ilustres personeros del Consejo de Cuenca.

Mientras todo esto sucedía, Huigra seguía siendo una importante Terminal ferroviaria, como también el lugar donde funcionaba la Gerencia y demás oficinas del Ferrocarril, pudo haber llegado a ser también uno de los pueblos más progresistas que se encuentran a lo largo de la línea férrea, porque su progreso iba entonces en la marcha de los pueblos modernos. Allí tenían canchas de tenis, basquetbol, futbol, pelota de hilo, etc., y, como no podía faltar, un elegante club ferroviario. Allí se levantaron también cómodos hoteles como el “Berlín” de propiedad de don Daniel Navarrete; el “Huigra” de propiedad de don Eduardo Morley, además las casas renteras de las familias Núquez, Andrade, Calle y otras, a donde mucha12 gente de la Costa salía a invernar atraídos por el buen clima y las comodidades que esta población ofrecía.

La histórica población era entonces una ciudad pequeña, en donde más tarde se construyó también una cómoda piscina aprovechando las magníficas aguas que vertían sus manantiales.

Por su parte el Ferrocarril levantó un edificio de cemento armado para la Estación y vivienda de los empleados, en reemplazo de la anterior que fue de madera. También en el parque frente a la Estación se levantó un monumento al mártir luchador General Don Eloy Alfaro, cuya imagen acompañada también de las figuras de los empresarios Archer Harman y John Harman, esculpidas en bronce, sintetizan su grandeza. Como tal, la población es esa época se hallaba en todo su apogeo, pero como lo bueno no dura, fue el río el primero en asolar con sus crecidas aguas por más de una vez, llevándose hermosas casas y dañando su estructura. Luego sucedería, la llegada del Ferrocarril Sibambe-Cuenca a la estación de Tipococha, lo que cortó de hecho el transporte entre las ciudades del Austro y Huigra. Por fin el golpe mortal, cuando las oficinas del Ferrocarril en 1938 fueron trasladadas a la ciudad de Riobamba, dejando únicamente los edificios de lo que fue la hermosa Gerencia del Ferrocarril del Sur.

Estos y otros factores adversos, influyeron en la suerte de la población de Huigra, la cual en medio de sus adversidades ha seguido manteniéndose firme en sus propósitos, siendo aún asiento de muchos personajes tanto extranjeros como nacionales, unos que llegaron a trabajar en el ferrocarril y otros llegaron a establecerse por lo agradable de su clima y por la belleza de sus cascadas.

Citaremos como el primero a Eduardo Morley, el fundador de la población, quien vivió allí cerca de 50 años hasta que la muerte cerró sus ojos. Asimismo, vivieron algunos de sus coterráneos de apellidos: Godd, Dingledine, Crow, Poney, Simons, Dobbie, Teague y otros.

De los nacionales citaremos los nombres de Antonio Calderón, Daniel Medina, Isidoro Andrade, Víctor y Antonio Loza, David Molina, Telésforo Aguirre, Víctor Vaca, Ariolfo Idrovo, Daniel Navarrete, Enrique Ponce, Rosa Barragán, Mercedes Loza y más gente que han seguido llegando. De los jamaiquinos, recordaremos a Juan Enrique Wilmot, Federico Brown, Pedro Terrelenge, Santiago Walker, W Robinson, John Stevens y otros. Allí tampoco falto el asiático apellido Yonfá, quien cooperó desde sus principios con la vida del pueblo hasta el año 1938 que fue levantada la Gerencia del Ferrocarril.

Más tarde también llegó a vivir en esta población Elia Liut, el célebre aviador italiano, quien por primera vez piloteando el avión “Telégrafo No 1”, en 1926, atravesó los Andes Ecuatorianos; establecido que fue en esta población, contribuyó eficazmente en la plantación13 del tomate, planta que hasta entonces no se cultivaba en la zona y que resultó ser apropiada para el lugar.

Por aquel mismo tiempo, llegó también a vivir en Huigra el General Leónidas Plaza Gutiérrez, el mandatario que en su primera presidencia realizó la construcción del Ferrocarril desde estos lugares hasta inaugurarlo en 1905 en la ciudad de Riobamba. Y así fue como, el momento de desembarcar del tren en la estación de Huigra lo primero que vio fue el monumento de Eloy Alfaro y sintió tanta indignación (porque era un enemigo político), que le ocasionó un ataque al corazón y posteriormente le sorprendió la muerte el 17 de Septiembre de 1932, su cadáver fue conducido en un tren expreso para ser velado en la intimidad de su hogar, donde vivió los años más plenos de su existencia extraordinaria. Así pago el tributo en el lugar mismo donde se hizo cargo de la construcción del ferrocarril, visitando quizá por última vez el monumento de su coterráneo y compañero de luchas General Don Eloy Alfaro.

Parroquialización

Históricamente, Los campesinos del sector llamaban a ese lugar “Huagra”, palabra que el Quichua significa Toro Macho, y se debe a que en esta región se criaban, casi en estado salvaje, miles de cabezas de ganado que pastaban en el valle. La pronunciación de los “gringos”, hizo que la palabra se degenerara en Huigra es este nombre el que gana más simpatía entre los habitantes y se decide por mayoría realizar movilizaciones para que el proyecto de parroquialización del lugar se llame Huigra, logrando su propósito mediante Acuerdo Ministerial No. 546 fechado el 7 de mayo de 1907, durante la 2da administración del Gral. Eloy Alfaro Delgado, hecho único en la vida administrativa de la República, ya que solo pocos años atrás se habían instalado los primeros habitantes.

Acta de parroquialización de Huigra.

Su ubicación geográfico – fronteriza entre las provincias de Chimborazo, Bolívar, Cañar, y Guayas, aseguraba a este rincón patrio gran porvenir. Así conocido era que por estos lugares se acortaban las distancias de entrada y salida de la Sierra al Litoral.

Transcurrían los años 1905 – 1906, los residentes del caserío de Huigra, sintieron la necesidad de elevarlo a la categoría de parroquia, logrando este propósito en enero de 1907, cuando se aprobó un proyecto de Ordenanza Municipal donde se acordaba que el caserío de Huigra, pase a ser una parroquia rural con el nombre de “Calderón” en homenaje al héroe niño quien ofrendara su vida en la batalla del Pichincha, situación que no fue aceptada por la mayoría de los habitantes.

Muchos de sus residentes, eran oriundos de Sibambe, parroquia que se vería afectada en sus intereses territoriales. Esta situación origino una serie de divergencias por los criterios contrapuestos que se esgrimían con relación a este delicado tema. Más pudo la perseverancia de sus habitantes hasta cuando logran hacer llegar su voz ante las autoridades municipales del cantón Alausí, quienes con fecha 10 de enero de 1907 aprueban en primera discusión un proyecto de Ordenanza Municipal. La primera parte de su empeño por conseguir la Parroquialización, se había dado. Ahora los trámites tenían que seguir en la ciudad de Quito. No desmayaron en su esfuerzo y desde luego aprovechando de los servicios del ferrocarril que para ese entonces estaba cerca de la capital, viajaron una y otra vez a fin de conseguir el ejecútese de parte del Gobierno Nacional.

Cumplída la Primera Magistratura del Estado, el general Eloy Alfaro, quien conocía los pormenores y el sacrificio de un puñado de valientes ecuatorianos que habían podido levantar en las breñas y a la entrada de la Cordillera de los Andes, una pujante población que con todo su derecho, solicitaba le sean reconocidos sus justas aspiraciones; ser elevada a parroquia civil. Apenas dos meses se tuvo que esperar desde cuanto la municipalidad había acordado crear esta parroquia. Quedando declarada como una parroquia más del cantón Alausí, misma que contaba con 21 comunidades y 2 barrios tales como: Barrio Guayaquil y Azuay; posteriormente con el crecimiento de la población se van formando 7 barrios entre los que sobresalen el Barrio las Violetas, Turístico, 24 de Mayo, Eduardo Morley, San Francisco, Independiente, Huigra Viejo. Actualmente sus límites son: Norte: Cumandá y parroquia Sibambe, Sur: Parroquias Llagos y General Morales (provincia, Cañar), Este: parroquias Sibambe (Alausí), Capsol, Compud, Llagos (cantón Chunchi), Oeste: cantón Cumandá, parroquias Ventura y General Morales de la provincia de Cañar.

Se recuerda que esta parroquia fue fundada por, Don Eduardo Morley, hijo de William Henry Morley, nieto de Richard Morley, socio fundador de la firma J.R. y Morley de Londres Nottiyman, Inglaterra. Este personaje laboró junto al ingeniero norteamericano Acher Harman quien construyó la línea ferrara para unir la sierra con la costa ecuatoriana denominándolo a este proyecto “el ferrocarril más difícil del mundo” ellos deciden acampar en lo que actualmente es Huigra